No es sencillo dar una definición de lo que es exactamente la inteligencia. Algunos prefieren la respuesta más rápida y afirman que es la capacidad de resolver problemas. Lo cierto es que existen tantas formas de medir la inteligencia como tipos de inteligencias.
Nos consideramos, a veces de forma exagerada, los seres más inteligentes del universo conocido. Y notamos una gran separación entre nuestro grado de inteligencia y el grado de inteligencia del resto de los animales. A continuación les mostramos los 10 animales más inteligentes del mundo, después de los seres humanos.
Chimpancé
Los chimpancés son los más cercanos a nosotros, no solo en inteligencia sino a nivel biológico. Con ellos compartimos más del 96% de la información genética. Lo primero es que tienen conciencia de sí mismos. Si se pone un chimpancé frente a un espejo, este no interpreta a su reflejo como otro chimpancé sino como exactamente lo que es, su reflejo.
Son muy empáticos y sociables, entre ellos se acicalan, participan de conjunto en la crianza de los pequeños. Son muy cooperativos, en estado salvaje planean la caza, se posicionan adecuadamente antes de lanzar el ataque sobre la presa y mediante gritos corrigen las posiciones de los compañeros a fin de acorralar al desdichado. Aquellos que interactúan con humanos se vuelven extremadamente inteligentes, al punto de que algunos han aprendido hasta como cocinar sus alimentos.
Delfín
De los delfines destaca su capacidad de aprendizaje, con unos pocos intentos un delfín puede aprender casi cualquier truco que el entrenador se proponga. Estos sociables compañeros tienen un lenguaje que en complejidad se asemeja al nuestro, el problema es que no lo entendemos del todo. Algunos afirman que los delfines se otorgan nombres entre ellos y se llama.
Son especialmente sociables con los humanos, no son pocos los informes de delfines que han salvado la vida a personas en altamar, ya sea ahuyentando tiburones o buscando rescate. Este es un indicio claro de empatía que transciende a la propia especie, algo que es muy propio de los humanos que por ejemplo pueden sentir lástima por un cachorro abandonado.
Elefante
¿Quién no ha oído alguna vez la frase ¨Tiene memoria de elefante¨? En efecto, los elefantes son los campeones de la memoria del reino animal. Pueden recordar los rostros de personas que han dejado de ver por varios años, y si esta persona está asociada a algún recuerdo negativo, se notarán nerviosos o incluso agresivos.
Pueden cooperar con los humanos en la realización de tareas pesadas como cargar o mover pesados troncos de árboles y todo esto a base de indicaciones sonoras. Algunos afirman que son capaces de disfrutar de la pintura, experimentos en los que se les ha puesto a pintar muestran que son capaces de asombrarse y de seguir avanzando en sus propios dibujos.
Cuervo
El cuervo es el ave más inteligente de todas por un amplio margen. Un cuervo puede aprender por sí mismo una secuencia de pasos para resolver un problema. En un experimento se cuelga un pedacito de comida de una cuerda. Solo dos de diez fueron directamente a tratar de coger el alimento colgante, los demás, fueron tramo a tramo recogiendo la cuerda hasta que el trozo de pan llegó a sus picos.
Pero más aún, el nivel de empatía de los cuervos es tal que realizan funerales. Si un miembro del grupo muere, se agruparan a su alrededor durante un buen tiempo, emitiendo chillidos y aleteando.
Pulpo
El pulpo nace en la más plena soledad, no tiene quien le enseñe a cazar, esconderse o huir, sin embargo, lo aprende por sí mismo a base de prueba y error. Su gran entendimiento visual le permite escoger el mejor camuflaje para cada situación. Si se les coloca en un laberinto artificial, con mecanismos para abrir y cerrar las puertas, luego de un tiempo de tratar y tratar aprenden la secuencia de operaciones para salir.
Abejas
Generalmente asociamos la inteligencia a una sola entidad, a un solo cerebro. Sin embargo, la naturaleza puede sorprendernos con inteligencias colectivas que desafían los más duros problemas matemáticos. Las abejas tienen un cerebrito diminuto pero si sumamos todos los de la colmena veremos que se trata de un gran cerebro. Se dividen por roles bien establecidos.
La reina (procrear), la corte (alimentar y acicalar a la reina), las defensoras (siempre en la puerta de la colmena inspeccionando agresores), las recolectoras (salen a buscar néctar), las obreras, almacenan y elaborar la miel. Así, en la colmena se pueden encontrar hasta de diez roles diferentes. Otro aspecto destacable es que las abejas ostentan el lenguaje insecto más complejo. Cuán lejos y en qué dirección están la flores, cuán lejos y en que dirección hay un buen espacio para emigrar. Todo esto en un idioma conocido como la danza de las abejas.
Loros
Su complejo sistema de vocalización les permite imitar las palabras humanas más complejas, sin embargo no son como se pensaba, simples imitadores. Un loro puede asociar sonidos de objetos, llave, taza, bolígrafo. También puede decir no quiero cuando quiere decir no quiero. O dame una galleta cuando realmente tienen hambre. O sea, no es solo imitación, es imitación pero asociada a objetivos específicos y esto es indicio incuestionable de inteligencia.
Perros
Los perros son sin dudas inteligentes. Se piensa que mucha de su inteligencia la ganaron en su interactuar con nosotros, sin embargo hay teorías que dicen que fue al revés, y que mucha de nuestra actual inteligencia se debe a la interacción que desde millones de años empezamos a establecer con estos animales. Sea cierto o no, la verdad es que nos fueron y son muy útiles.
Esa compenetración con nosotros los hace darse cuenta en muchos casos que sus dueños están bajo algún peligro. Abundan las historias de canes que han defendidos crías humanas, que han avisado cuando el dueño ha sufrido algún accidente. No es aleatorio el hecho de que por ejemplo sean perfectos guías para personas con problemas agudos de visión.
Ardillas
Son sorprendentes recolectoras de alimentos. Saben recordar rutas y lugares por los que no deben volver a pasar. Recolectan la mayor cantidad de comida que pueden, y astutamente esconden el lugar a fin de que no sea descubierto por los competidores.
Cerdos
Se pueden entrenar casi igual que un perro, dame la patica, date la vuelta, finge el muerto, etc. Se les ha descubierto soñando. Imposible saber qué pero se sabe que sueñan. También hay historias de cómo han aprendido a abrir la puerta del corral para así escapar.